lunes, 20 de agosto de 2012
14M *
Y un nuevo día amanece cuando el sol apenas tiene fuerza para castigar con su calor. La ciudad aun sueña tranquila y solo el ruido de unas ruedas sobre el asfalto desentonan en la calma veraniega de aquel lejano despertar.
De nuevo es veinte, un veinte que se pinta en cristalinos colores de nervios, expectación y sal. Los colores de la paleta de un pintor que sabe dibujar sonrisas eternas en unos ojos que no pierden el reflejo de aquel chocolate cálido que permanece por siempre en la memoria y en el corazón.
La ciudad se pierde tras el cristal de un autobús que sigue firme su rumbo, ante él solo una carretera y al final el paraíso.
Polseres Vermelles-Fix you
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