viernes, 13 de diciembre de 2013

Oh Capitán, mi Capitán


Cada instante de mi vida que dedico a enseñar me doy cuenta de que no podría haber elegido otro camino. Disfruto de cada concepto impartido, cada técnica mejorada, cada instante de descubrimiento en común y, especialmente, disfruto de ese brillo de orgullo en la mirada cuando cada alumno se sabe capaz de alcanzar sus propias metas.
Crezco con cada mente con la que trabajo otorgándoles un instante para poder descubrirse a sí mismas sin el miedo a saberse o sentirse juzgados. Me deleito en cada paso adelante, cada pequeña mejoría y cada resultado favorable. No importa si es un grupo o un alumno en solitario, pues con todos aprender es un juego y yo crecí jugando.











0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0

Préstame tus fuerzas, dame tu ternura


No hay comentarios:

Publicar un comentario