31 diciembre

Cinco minutos más para la cuenta atrás.

Se va de nuevo otro año más y quiero dedicar cinco minutos y sólo cinco para darle color a un 2013 que parece haber vivido oculto entre sombras.

23:55:00. Enero que te recibe con promesas de infinitos recuerdos que vuelven una vez pasadas las puertas dobles de cristal, pasado el pasillo improvisado entre parterres. Un bosque que apenas ha cambiado a pesar del tiempo, donde una tortuguita reina en tímido silencio ocupada en un cubo que nunca se termina de formar. Paredes que se tiñen de un blanco luminoso y enfermizo, pero que aun parecen contar entre susurros las viejas historias que el suelo le cantaba al cielo. Y si las distancias con los sueños se hacen cortas...

23:56:13. Febrero de golpes transportados en una caja vieja de cartón marrón. Una imagen que la inocencia cree que tan sólo ocurre en las películas pero que se torna una realidad gélida en las palabras de una madre asustada y una hermana traicionada. Febrero que recuerda a quién no hace honor al apellido que ostenta, todo miseria envuelta en su orondo cuerpo... llevas niebla en tu interior.

23:57:46. Marzo, trae consigo la dulzura de unos bombones de chocolate negro y una sonrisa mal disimulada entre raíces cuadradas de cuadrados imperfectos. Trae de vuelta recuerdos de tiempos pasados que renacen con el vuelo de las flores de cada almendro. Y te invita a viajar allí donde ella siempre espera, aunque llueva, rodeada de flores blancas.
Abril para descubrir y pintar Madrid del rojo de mi carmín. Y Mayo para reencontrarse con viejos compañeros que el tiempo había convertido en la historia de otra persona, para no olvidar nunca a quién causó más de mil suspiros y aun hoy evoca sonrisas, para compartir un futuro que empezó a contar hace doce veinticincos. Gracias por escribirme esa canción, por arañarme el corazón.

23:58:15. Junio, una meta cruzada, una época acabada, un cuaderno ya cerrado y la incertidumbre más allá. El miedo de saber que ahora toca crecer, aprender y seguir adelante sin una mano que te guíe. Cientos de "ahora qué?" perdidos entre las olas de un mar testigo de muchas historias, la misma playa donde una tortuga quedó pintada.
Julio de sol, de calma y de volver atrás entre los capítulos de una serie que despiertan las ganas de buscar tu propio cometa.
Agosto y una luz se apaga y lloran cuatro personas.Un agosto difícil, de llanto y despedidas.

23:59:04. Septiembre, es tiempo de decir adiós. Adiós a un verano que se va con los últimos resquicios del sol. Adiós a quienes se van en busca de nuevos futuros, en pos de grandes oportunidades o simples cambios, siguiendo su propio camino y dejando en Madrid una ausencia que se nota.
Y octubre de música. Volver a ese lugar donde los sueños existen y casi se pueden tocar, mi trocito de Madrid que me arropa con su magia. Reencontrarse con viejos personajes que despiertan el deseo de igualar algo tan bello y poder, además, compartirlo contigo.

23:59:59. Noviembre de cambios y nuevas ideas. Retorna la maldición del inglés, dichoso él y su afán de protagonismo, haga lo que haga no consigo librarme de él. Por suerte esta vez el brujo es de buen ver, nada que ver con la aprendiz de demonio, quién lleva siglos atormentando a los estudiantes del Chusma con goce y sin piedad. Noviembre que me regala tardes entre lengua e inglés, y filosofía e historia si la ocasión se presta, de mano de un buen compañero.
Y Diciembre… diciembre de regresos, de reencuentros, de viajes improvisados y nuevos propósitos. Diciembre que pone el broche al 13, que hace que por fin termine y empiece un nuevo libro de páginas en blanco. Diciembre que se marcha dejando tras de si un agradable regustillo a juicio ganado y futuro en el horizonte.

Adiós a un año de idas y venidas, adiós 2013.


OTH-Someday is today and this is your life